“Si tu me quieres, . . . .”,
pues el amor puede ser fatal, si no es respondido.
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Por Horacio Duque Giraldo
Y resucitó Angelino Garzón, el Vice Presidente de la República. Tenía prácticamente
una pata en la tumba, como dicen los campesinos boyacenses.
Su situación de agonía por
efecto de un cansancio cerebral y un accidente cerebro vascular fue dramática.
Afortunadamente para él y su familia se está recuperando y lentamente regresa
la normalidad a su vida. Ya está en su oficina realizando las funciones de su
cargo.
EL CASO DEL FUNCIONARIO NO ES solamente médico. Sus problemas de
salud, que vienen de tiempo atrás, a raíz de una grave cirugía de corazón
abierto por el bloqueo de sus arterias coronarias, se han complicado por causa
de sus obligaciones y las presiones política propios de las luchas por el
poder. La verdad es que Angelino ha debido capear la descomunal presión ejercida
tanto por J.M. Santos como por Vargas Lleras, quienes lo consideran un peligro
para las pretensiones reeleccionistas, del primero en el 2014, y presidenciales
del segundo, en el 2018.
Como Garzón estaba
construyendo su propio espacio para lanzarse de candidato a la primera
magistratura en el 2014, organizando su gente con actividades de derechos
humanos y pronunciamientos sobre diversos aspectos que él conoce muy bien, pues
fue líder obrero comunista y dirigente de la Unión Patriótica, como la carestía
de la vida, los bajos salarios, las necesidades de las regiones, el desempleo,
la reforma agraria, los abusos de los bancos y los temas sindicales, se volvió
muy incomodo para los altos círculos del poder, que prendieron rápidamente todas las alarmas.
De inmediato los testaferros del cogollo abrieron fuego con sus columnas y
declaraciones en los medios, a presionar para que Garzón se definiera como si
lo hecho ya por él no fuese una notificación de sus planes políticos de mediano
y largo plazo en la disputa por el poder nacional.
Santos/Vargas, magos de la
componenda y la maniobra oscura, expertos pokeristas de la politiquería
tradicional según se ufanan, se pusieron en marcha y proyectaron una “salida
elegante” del impasse con el fin de evitar un atasco mayor. Sin consultarle al
Vice lo lanzaron de candidato para la Dirección de la Organización
Internacional del Trabajo OIT que estaba por proveer. Todos sabían que el
cometido fracasaría pero el fin de la “dupla” era sacarlo de la jugada, a como
diera lugar. Los promotores eran conscientes de las precarias condiciones de
salud y los riesgos biológicos que asumía con el brete de la candidatura.
Y OCURRIÓ LO QUE TENÍA QUE OCURRIR. No obstante que se gastaron
millones de pesos en las gestiones y que Angelino debió vivir por meses en un
avión viajando de un lado para otro por distintos países y atendiendo infinidad
de reuniones, llamadas y encuentros, no quedó ni siquiera entre los tres
finalistas de los que se escogió un sindicalista británico como nuevo Jefe de
la OIT.
El golpe para el colombiano
fue tremendo y lo único que alcanzó a decir, antes de su postración, era que
eso no se lo había inventado él, por tanto no sentía la derrota, que los del
fracaso eran otros y el país. Hasta razón tenía, afirmaron muchos.
Luego vino la grave enfermedad
y el acelerado deterioro en su cuadro médico en las semanas recientes por los
supuestos daños cerebrales que lo reducían a cero. Los grandes medios del
régimen lo dieron por muerto y su jefe en la Casa de Nariño, sin respeto por la
triste condición del subalterno, se precipitó con la propuesta para suprimir el
cargo de Vice Presidente y regresar a la figura del Designado que escogen las mayorías
parlamentarias gobiernistas. Quedaba pintado Santos y su crónica práctica
traicionera y de deslealtad patológica. El dice que quien no cambia es un
idiota según lo leyó en los mamotretos de Churchill, su autor de cabecera.
Pero las vueltas que da la
vida. Angelino no se murió ni quedo invalido sin poder hablar, ni ver, ni
pensar, ni oír, ni razonar. Se recuperó y está de nuevo en su oficina,
acompañado de su esposa e hija. Esta vez más cauteloso y precavido con las
serpientes que lo acechan.
LO PRIMERO QUE DIJO es que lo mejor para solucionar el estallido
indígena del Cauca era dialogar y atender las peticiones de las comunidades.
Seguidamente se mostró de acuerdo con realizar una Asamblea Constituyente. Y
como sabe del tremendo impacto de sus posiciones anunció que se va a comunicar
con el país mediante Cartas temáticas.
Quien dijo miedo. A las
carreras salieron los adláteres del Presidente a exigirle la renuncia. Es lo
que han hecho Roy Barreras el Jefe del Senado, Posada el director de la Cámara
de Representantes, Galán el liberal y Simon el Bobito el hijo del expresidente
Cesar Gaviria quien intenta recuperar espacio después del fracaso de la reforma
a la justicia.
Me parece bien que Angelino se
haya recuperado en su salud. A nadie se le desea la muerte. Por eso me permito
sugerirle algunos destinatarios y temas para sus Cartas a la ciudadanía.
- Que le haga una carta
pública a Santos/Vargas para que tomen unos cursos de ética y lealtad con sus
compañeros de trabajo. Posar de expertos pokeristas para hacerles zancadilla a
sus amigos es un mal ejemplo para los ciudadanos.
- Que le envíe una nota a Germán
Vargas Lleras pidiéndole explicaciones por su compinchería con los
paramilitares de Martín Llanos en el Casanare y de Julio Acosta en Arauca.
- Que publique una epístola al
país indicando la Agenda nacional para la paz, la negociación política del
conflicto con las guerrillas campesinas y las reformas políticas, sociales, económicas,
electorales que requiere la nación para la superación definitiva de la guerra
que carcome a Colombia desde hace medio siglo.
- Qué le haga otra carta a
Uribe Vélez solicitándole que reconozca sus delitos y se entregue a la justicia
por sus vínculos con paramilitares, narcotraficantes y ladrones de los
presupuestos públicos.
- Que le escriba otra al
actual Ministro de Defensa para que renuncie al cargo en compañía del alto
mando militar de generales, dada su manifiesta incompetencia y afán
militarista, guerrerista y violento contra los indígenas, campesinos y los opositores
políticos al gobierno como Piedad Córdoba.
- Que le pida la renuncia a la
mediocre Ministra de Salud por su incapacidad para sacar de la profunda crisis
al sistema de salud de los colombianos.
- Que demande del Ministro de
Minas la revisión de la Locomotora Minera causante de enormes daños ambientales
y sociales y de la próxima desviación del Río Ranchería en la Guajira para
permitir que las multinacionales se roben 600 millones de toneladas de carbón
que hay en su lecho.
- Que exija la renuncia del
Ministro de Hacienda y de la Junta Directiva del Banco de la República por ser
los autores de las políticas neoliberales y de los TLC que destruyeron la
industria, la agricultura nacional y tienen en la pobreza más de 30 millones de
personas.
- Que le mande una epístola a
los congresistas solicitándoles la renuncia a sus cargos por corruptos y cínicos,
antes de que el país les revoque el mandato a causa de la aprobación de la
famosa reforma a la justicia que era una ley de punto final para dejar en la
impunidad la parapolítica y a personajes como Dilian Francisca Toro, Miriam
Paredes, Enríquez Maya y los artífices del robo a la Dirección de
Estupefacientes como el gamonal caucano José Darío Salazar, quien se apropio de
varios prostíbulos de los narcos en Cali, que habían sido incautados por la policía.
- Que le diga a la Ministra de
Educación que cuanto antes se vaya de su cargo porque su modelo neoliberal de
universidades lo repudió con gigantescas movilizaciones el estudiantado
colombiano.
- Que le sugiera al Ministro
de Agricultura se haga a un lado porque su Ley de tierras y la “revolución
agraria” son un absoluto fracaso.
- Que le diga al General
Santoyo extraditado a una cárcel de los Estados Unidos por ser socio de la
Oficina de Envigado y de los narcotraficantes paisas cercanos a la familia
Uribe Vélez, que cuente todo lo que sabe, que diga todo lo que vio en su tiempo
como escolta de Álvaro Uribe. Que confiese como hizo todas las operaciones para
eliminar casi 50 miembros de la familia Usuga señalada por su patrón Uribe de
ser la supuesta causante de la muerte de su progenitor en un negocio de drogas.
- Que le envíe una nota
pública especial a Mancuso, Macaco, Jorge 40, el Iguano, Ernesto Báez, el Alemán,
don Mario, Gordo Lindo, Ramón Isaza, Pirata y otros jefes paramilitares para
que entreguen toda la información a la justicia sobre militares, empresarios,
políticos y funcionarios públicos implicados en sus crímenes de lesa humanidad
contra 7 millones de colombianos victimas de la violencia y sobre el apoyo que
le dieron a Uribe para hacerse elegir Presidente.
- Que le mande una carta a los
militares comprometidos en los “falsos positivos” para que confiesen sus culpas
y le pidan perdón a las víctimas en vez de estar presionando impunidad con un
fuero militar tramposo.
- Que le mande una nota
especial a Luis Carlos Restrepo, autor de falsas desmovilizaciones, para que se
entregue y cuente las fechorías de su patrón. Que haga lo mismo con doña María
del Pilar Hurtado, Bernardo Moreno y demás culpables de las chuzadas telefónicas
contra los opositores de la Seguridad Democrática.
- Y por último, que no de
último, que nos mande una CARTA a todos los colombianos entregándonos detalles
de su proyecto para realizar un Gran
Congreso Nacional de Derechos Humanos, que nos parece una buena idea, el
cual le sugiero lo haga pronto y ojala en el Cerro de Berlín, en Toribio Cauca,
con la presidencia de los indígenas Nasa, puede ser en cabeza de Feliciano Valencia
y con la custodia de la Guardia Indígena para que los militares, paramilitares
y los testaferros políticos de Santos y Vargas Lleras no lo vayan a torpedear.