jueves, 9 de mayo de 2013

Con tantas reformas necesarias e inaplazables es imprescindible una Asamblea Constituyente




Allende La Paz, Cambio Total.

El Foro Agrario produjo sus propuestas. Necesarias para realizar una Reforma Agraria que le entregue la tierra a quien la trabaja y así asegurar la soberanía alimentaria del país. El Foro de Participación Política también produjo sus importantísimas propuestas. Que llaman a "reformar" todo el sistema electoral, es decir, crear uno nuevo porque no se puede reformar un sistema corrupto so pena de caer inmerso en la histórica corrupción del sistema electoral (constricción del voto, constreñimiento de jurados, compra de votos (Names), compra-venta de votos (Robertico Gerlein), adulteración de resultados electorales (Jorge Noguera y Uribhitler en el Magdalena, etc.).

Apenas van 2 temas abordados y las propuestas que han salido de ellos hace pensar que es necesario fundar un Nuevo País. Un país en donde haya Paz con Justicia Social. Un país en donde no se vuelva una mera consigna o mera ley lo propuesto por los colombianos de todas las clases. Porque si algo ha demostrado la enorme trascendencia del Proceso de Paz es haber mostrado que podemos ejercer el poder todos los colombianos. No de una ínfima minoría como hasta ahora. Esos laboratorios de Paz que son los Foros citados por la Mesa de Conversaciones de La Habana ya han trascendido los propósitos de la Mesa y apunta y se dirige mucho más allá: La imperiosa necesidad de una Nueva Institucionalidad, de Nuevos actores en la institucionalidad, de construir una verdadera democracia -revolucionaria- y no el remedo que presenta una cara "democrática" con acciones de hecho del Terrorismo de Estado, construir entre todos una Nueva Colombia en Paz con justicia social y soberanía nacional.

Las propuestas que saldrán de los otros temas reafirmarán lo aquí expuesto. Por ello debemos hacer las discusiones con los piés sobre la tierra, con pasos seguros, sin caer en las provocaciones de los "enemigos de la Paz", pero denunciando con todo rigor y firmeza esos intentos desestabilizadores de la Mesa, que es en últimas lo que buscan y quieren los "enemigos de la Paz", los "amigos de la guerra". Cuando se llegue el momento de firmar los Acuerdos -si se llega a ellos- son tantos y variados los temas que se verá diáfanamente la imperiosa necesidad de derrumbar el antiguo orden de cosas y construir un Nuevo Orden.

Imperiosamente necesitamos un Nuevo País
. Tenemos que construirlo entre todos si no queremos hundirnos en el pozo sin fondo de la barbarie a la que quieren conducirnos. Un país en donde quepamos todos, en donde vivamos todos, en donde luchemos todos por la felicidad nuestra, de nuestras familias y de nuestras colectividades. Para ello debemos recuperar nuestra memoria histórica y societal. Sabemos que nadie más que los sectores que han pelechado a la sombra del Estado, es decir, la oligarquía y los terratenientes-ganaderos, muestran su resistencia a la Paz y a un Nuevo País. Si cuando se firmen los Acuerdos -si se firman- no han entendido la grandeza del momento que viviremos los colombianos serán dejados de lado por la "rueda de la historia", la cual aplastará a todo aquel que ose ponerse en su camino triunfal.

En el momento actual nuestro llamamiento es por seguir construyendo ese Nuevo País. Con seriedad. Con alegría. Con optimismo. El  futuro es nuestro. No podemos dejar que los cavernarios, los retardatarios, los que han sumido a los colombianos en la "noche oscura" del Terrorismo de Estado sigan definiendo políticas que afectan nuestras vidas. Luchemos todos juntos. Reconstruyamos nuestro tejido social roto por el Terrorismo de Estado. Reconstruyamos nuestras organizaciones. Fundemos otras nuevas. Así, de esa manera, alcanzaremos la Nueva Colombia.