El
Movimiento de Víctimas de Crímenes de Estado sugiere depurar los organismos de
seguridad, instaurar una cátedra de derechos humanos y que el presidente pida
perdón.
Por: Alfredo Molano Jimeno
El
Movimiento de Víctimas de Crímenes de Estado sugiere depurar los organismos de
seguridad, instaurar una cátedra de derechos humanos y que el presidente pida
perdón.
Por: Alfredo Molano Jimeno
El
Movimiento de Víctimas de Crímenes de Estado (Movice) presentó a los delegados
de Naciones Unidas y a los embajadores de los países garantes del proceso de
paz entre el Gobierno y las Farc —Noruega y Cuba— un documento titulado
“Propuestas mínimas sobre la verdad, justicia, reparación y garantías de no
repetición”. La idea es que el texto sea entregado a las partes negociadoras en
La Habana para que sirvan de insumo a la hora de materializar los acuerdos de
paz.
Aunque las
propuestas son varias, todas giran en torno a los derechos de las víctimas:
verdad, justicia, reparación y garantías de no repetición. “Una paz que no
tenga la voz de las víctimas es una paz sin bases, sin fundamento, sin futuro,
sería más la desmovilización de un grupo armado ilegal que el anhelo de los
colombianos de vivir sin violencia”, expresó el sacerdote jesuita Javier
Giraldo.
La primera
propuesta consiste en la creación de una “comisión de la verdad” que ayude a
esclarecer los crímenes de lesa humanidad y de guerra, y las graves violaciones
a los derechos humanos cometidos en Colombia desde 1945 hasta la fecha de
entrada en vigencia del acuerdo de paz.
Esta
comisión no tenía funciones judiciales, pero podría suministrar información que
contribuya a aclarar casos que han quedado en la impunidad. A la vez, serviría
para conocer el paradero de aquellas personas víctimas de desaparición forzada.
De igual manera, propone contribuir al esclarecimiento de responsabilidades de
servidores públicos y actores no estatales en crímenes contra civiles.
En cuanto
a la reparación, el documento plantea restituir efectiva y materialmente los
predios de las personas que hayan sido desplazadas, así como eliminar cualquier
restricción jurídica, como los contratos de uso o los terceros de buena fe,
para que los desplazados puedan retornar a sus tierras. Se propone también
desmilitarizar aquellas regiones que sufrieron la violencia cometida por
miembros de la Fuerza Pública, el retorno en condiciones de seguridad de
quienes viven en el exilio, así como revisar la Ley de Víctimas y Restitución
de Tierras con los movimientos de víctimas.
Las
medidas de satisfacción propuestas por el Movice se orientan a que el Estado
haga un reconocimiento público de las graves violaciones a los derechos humanos
en que —por acción u omisión— se vieron involucrados funcionarios o entidades
del Estado. En este sentido, piden establecer el 6 de marzo como el Día
Nacional por la Dignidad de las Víctimas de los Crímenes de Estado. Igualmente,
desclasificar la totalidad de los documentos reservados del Estado, en especial
aquellos de inteligencia que registran casos de graves violaciones a los
derechos humanos y crear una cátedra permanente de derechos humanos para
primaria, secundaria y universidad.
Finalmente,
las propuestas de no repetición apuntan a que se produzca una depuración de las
tres ramas del poder público, para excluir a aquellos funcionarios que hayan
participado o permitido crímenes contra civiles o impunidad en las
investigaciones por éstos. Al mismo tiempo, se sugiere que aquellos
funcionarios a los que se les compruebe responsabilidad deberán quedar
inhabilitados para ejercer cargos públicos de nuevo. Incluso se promueve la
creación de una comisión revisora de la doctrina de seguridad del Estado, con
el fin de identificar aquellas “prácticas y doctrinas que promueven la
persecución y estigmatización de movimientos, partidos o personas que adelanten
acciones de oposición política al Gobierno”.
“Hemos
propuesto el reconocimiento de la responsabilidad del Estado en graves
violaciones a los derechos humanos, en el momento de la firma de un acuerdo de
paz por quien sea el presidente de la República. También una comisión de la
verdad con amplias facultades, en la cual quienes hayan cometido violaciones a
los derechos humanos los reconozcan ante las víctimas, pidan perdón y
contribuyan a esclarecer la manera como ocurrieron los hechos; la reducción de
las Fuerza Militares una vez termine el conflicto, en un lapso de diez años; el
deslinde de la Policía del Ministerio de Defensa; la desclasificación de los
archivos de inteligencia y del Ejército para tener la garantía de que no se
repetirán los hechos de violencia contra ningún sector de oposición o de
izquierda en este país”, explicó el representante y miembro del Movice, Iván
Cepeda.