sábado, 23 de marzo de 2013

Medios, peroidistas y proceso de paz








Allende La Paz, Cambio Total.

La Mesa de Conversaciones en La Habana ha permitido también ver crudamente el papel que juegan los medios de comunicación en poder de la oligarquía, y de sus periodistas. No es casualidad. Tratar de creer que los periodistas de los medios oligárquicos no tienen una ideología política cuando escriben o realizan sus « informaciones » sería más que ingenuidad. Ellos, los periodistas, responden a una ideología propiciada desde el estado, mucho más cuando se consideran a sí mismos « formadores de opinión pública », y el estado responde a los intereses oligárquicos.

Ni se diga de los dueños de los « medios ». Todos son miembros exquisitos de la « sociedad »colombiana, es decir, oligarcas que abordaron su ingreso a éstos para conservar el poder. Así los sectores dominantes en la oligarquía tienen sus « medios ». Santo Domingo, Ardilla Lulle, Sarmiento Angulo, Sindicato Antioqueño, cada uno de ellos tienensus « medios » que responden ideológicamente a la posición ideológica-política del dueño y los « periodistas »les funcionan por un « plato de lentejas ».

Por ello, vemos que muchos de estos periodistas ante la Mesa de Conversaciones de La Habana esgrimen un discurso confrontativo con la insurgencia y de aceptación y justificación con los delegados gubernamentales. Es más, muchos de ellos como « oficiales de la reserva »reproducen en sus escritos y en sus preguntas capciosas, confrontativas, los informes de los militares o la policía y develan a que institución militar estatal pertenecen.

Esta percepción aberrante impide el tratamiento objetivo de las informaciones de la Mesa y distorsiona las propuestas de las FARC-EP, siempre encontrándoles maliciosamente una doble intención, e impide aclimatar el ambiente de Paz que debería vivir y sentir el pueblo colombiano. Los medios en poder de la oligarquía juegan su papel de « peón » en el conflicto interno y se atraviesa como « vaca muerta » en la carretera.

Evidentemente que desde el gobierno no hay unidad de criterios sobre el proceso que se adelanta en La Habana. El « pesista » Pinzón, mindefensa, dispara todos los días su ametralladora verbal contra las FARC, quizás en manifestación de su inmensa frustración por no poder « arrasar » el derecho del pueblo de luchar por su vida y por un mejor mañana. Igual hace el mininterior, de quien se esperaría mejor tratameinto del proceso en La Habana toda vez que su cartera es la de la « política » ; o la posición intransingente del minagricultura ante lso temas que debían ser de su dominio, pero que demuestran a qué intereses responde el ministro Restrepo, a los terratenientes-ganaderos.

Mientras, las FARC-EP exhiben unidad de todos los guerrilleros con su Secretariado Nacional y su comandante en Jefe, a pesar de toda la alharaca proferida en torno de un supuesto resquebrajamiento de la unidad organizacional de las FARC por cuenta de las Conversaciones en La Habana, sin valorar o contemplar siquiera que ha sido una constante histórica de las FARC la lucha por una salida política civilizada a la guerra recetaday ordenada desde los centros de poder en Washington y Bogotá.

La superficialidad de los análisis de los medios burgueses es a todas luces muestra que los « periodistas » son meros « escribidores de informaciones » ya que aplican, además, el principio mercantilista que todo se vende en el mundo del espectáculo. Y el espectáculo es la guerra y por ello sueñan con hipotéticos triunfos militares contra la guerrilla, sin abordar que en Colombia hay querrilla no porque el pueblo quiera sino porque desde hace más de medio siglo los han agredido y tratado de asesinardesde el Estado.

Esa superficialidad y falta de objetividad impide ver los avances en el discurso de las FARC y su reconocimiento ha corrido por cuenta de periodistas y analistas extranjeros quienes señalan que las FARC con cada intento de Conversaciones han ido modernizando su lenguaje y adecuándose a las nuevos momentos. Por ello resulta paradójico que el coordinador del equipo gubernamental todavía a estas alturas esté planteando que el « modelo de desarrollo » no se discute, cuando si una solución duradera es lo que se busca debepartir precisamente de la discusión y diálogo de ese y otros puntos fundamentales de la Agenda.

La Mesa en La Habana sigue mostrando a unas FARC prolíficas en su producción de propuestas –más de 100- que van a modernizar el estado en su conjunto, que muestra la necesidad de sustituir la « colcha de retazos » que hoy es la Constitución del 91.


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Publicado por Cambio Total en CambioTotalRevista el 3/23/2013 01:18:00 a.m.