jueves, 20 de diciembre de 2012

Medellin, ¿Debe renunciar Anibal Gaviria por el caso de su padre?

Anibal Gaviria en la posesión de Alcalde en Medellín



Por Horacio Duque

Anibal Gaviria es el actual Alcalde de Medellin, la segunda ciudad más importante de Colombia, que en otras épocas fue escenario de episodios brutales de violencia protagonizados por los jefes de los carteles de la droga como Pablo Escobar y los Galeano. De igual manera, las bandas paramilitares de Castaño y Don Berna, asolaron amplios territorios urbanos y comunales con asesinatos, masacres, desapariciones y torturas, en complicidad con organismos de seguridad, militares y policiales. El General Raul Santoyo, hoy condenado en una prisión gringa, junto a otros oficiales como Gallego, es el nombre de un alto jefe policial hundido hasta el cuello en redes de complicidad y apoyo a las bandas criminales desde el Gaula y los comandos de policía. Sus crímenes fueron múltiples y van desde interceptaciones telefónicas hasta operaciones de narcotráfico y lavado de activos, pasando por desapariciones y asesinatos en serie de lideres populares.
Anibal es hijo, junto a Irene e Isabel, de Guillermo Gaviria Echeverri, un reconocido empresario del banano y los lácteos en Antioquía quien permanece en detención domiciliaria debido a una medida de aseguramiento dictada por la Fiscal 57 de Derechos Humanos por varios delitos cometidos en asociación con los sanguinarios grupos paramilitares, que el caballero financió por largos años con la orden de acribillar lideres de izquierda, sindicales y populares, tanto en Medellin como en Uraba. Se trata del típico sujeto que influidos por ideas oscurantistas y creyéndose un heraldo de la libertad y la democracia encuentra obvio y natural usar la violencia y la fuerza para eliminar sus contradictores políticos.
Gaviria Echeverri no es ninguna manza paloma como la quieren pintar sus herederas y heredero en los medios de comunicación de que disponen en abundancia. Es una ficha díscola e intolerante que preconiza la acción directa contra los que considera enemigos de su falsa democracia liberal. Es un emblema del conservadurismo paisa causante del derramamiento de sangre política como ocurrió con la Unión Patriótica en Antioquia que fue aniquilada por los escuadrones de la muerte.
Pedro Hazbun Bonito, un “Para” que esta preso ha entregado muchas pruebas que evidencian la ruta criminal de Gaviria Echeverri durante muchos años. 
Adicional mente, en años recientes, varios paramilitares que colaboran con la justicia, después de someterse a la misma, han indicado de manera concreta que el actual Alcalde de Medellin también ha sido colaborador de las autodefensas. Lo hizo como Gobernador de Antioquia y también como candidato a la Alcaldía de Medellin.
Es un asunto que el burgomaestre no aclara porque cada vez que se le trata evade olímpicamente. Por supuesto, este es un tema para las autoridades judiciales debido a que estamos ante lo que los especialistas llaman noticia criminal, frente a la cual un fiscal o un juez debería proceder de manera inmediata. Pero las cosas del poder son así, la justicia solo es para los de ruana, como decimos popularmente.
Vistas todas las aristas judiciales de este caso que compromete a los Gaviria, padre e hijo, lo que muchos nos preguntamos en Antioquia es lo siguiente, ¿Debería Anibal Gaviria renunciar a su actual cargo como Alcalde de la ciudad para permitir que fluyan las investigaciones e imputaciones correspondientes? ¿No será ese el paso adecuado en una situación tan grave como la que estamos constatando en Medellin y que compromete su estabilidad y buen nombre ante el mundo?.
Dejo estas cuestiones formuladas porque el año que viene este debate llegará a otros niveles judiciales y políticos que este clan familiar no quiere asumir.