Paisaje harmónico, pero la población del Valle de Cimitarra ha sido objeto por el Terrorismo de Estado y la guerra de Baja y Alta Intensidad, acusada de ser guerrilleros. |
Por Horacio Duque
Para los días 17, 18 y 19 de
diciembre del 2012, está prevista la realización de un Foro agrario organizado
por la Mesa de Conversaciones de paz que está instalada en La Habana para
adelantar un proceso que permita la solución del conflicto social y armado y la
construcción de la paz estable y duradera, mediante diálogos entre el gobierno
nacional y las FARC-EP. Ya está en funcionamiento una pagina Web, mecanismo abierto
que recibe propuestas e interactivo con la opinión ciudadana.
La plataforma de la gestión política que transcurre en Cuba es el
Acuerdo general firmado entre los plenipotenciarios de las partes, con diversos
campos de acción que configuran un todo complejo donde
intervienen múltiples variables estrechamente asociadas.
Una vez instalada la Mesa y con días de funcionamiento, durante los
meses de noviembre y diciembre, en el debate del tema agrario, se hacía
necesario implementar enfoques, reglas y procedimientos para propiciar la
armonía de una paz que adquiere niveles metodológicos y de coherencia
adecuados. La acción que se adelante, al recoger el amplio acervo de
experiencias acumuladas, registra una racionalidad y un orden saludable para
los objetivos indicados, que se orientan a la solución del problema de la
violencia.
El texto del Acuerdo especial indica que la construcción de la paz es
un asunto de la sociedad en su conjunto que requiere la participación de todos,
sin distinción. Además, entre los aspectos temáticos se hace una expresa
referencia a los mecanismos democráticos de participación ciudadana, incluidos
los de participación directa en los diferentes niveles y diversos temas. Y una
regla de oro de todo el esquema para la paz orienta que para garantizar la más
amplia participación posible, se establecerá un mecanismo de recepción de
propuestas sobre los puntos de la agenda de ciudadanos y organizaciones por
medios físicos o electrónicos De común acuerdo y en un tiempo
determinado, la Mesa podrá hacer consultas directas y recibir propuestas sobre
dichos puntos o delegar en un tercero la organización de espacios de
participación. Con el fin de contribuir al desarrollo del proceso, se podrán
realizar consultas a expertos sobre temas de la agenda, una vez surtido el
trámite correspondiente.
Así son los asuntos del
Estado, desde la Grecia clásica, y la Mesa procede en consecuencia.
El Foro ha sido confiado en su organización a la Universidad Nacional
y a una agencia de las Naciones Unidas que procuraran su realización eficaz.
Mañana se instalará y sus deliberaciones durarán hasta el miércoles 18 de
diciembre.
Lo importante es que dicho escenario escuche la voz de los campesinos,
de los empresarios del campo, de los expertos y académicos con sus propuestas e
iniciativas.
Desde luego, el repertorio de ideas será abundante en diagnósticos y
modelos que indiquen soluciones al atasco del mundo rural atrapado por la
violencia de poderosos latifundistas feudales, empeñados en mantener relaciones
sociales desuetas, causantes del despojo, el desplazamiento, las masacres y la
debacle de casi 15 millones de campesinos sumidos en la pobreza y la falta de
libertades.
La solución del problema agrario colombiano en la perspectiva de la paz
implica pensar en su modernización mediante la democratización de la propiedad
rural y la incorporación de sistemas y tecnologías acordes con los avances de
los sistemas agrícolas de las economías más desarrolladas.
Las Zonas de Reservas Campesinas,
al interior de la fértil frontera agrícola, son un modelo que tiene grandes
potenciales de justicia social que definitivamente son prioritarias en un
acuerdo para la paz, ojala con los millones de hectáreas que demanda
la insurgencia revolucionaria, vocera de los campesinos pobres.
Del capitalismo en la agricultura que se encarguen los capitalistas
con mentalidad del siglo XXI, que no es precisamente el que se dibuja en el
discurso estridente y cavernario del señor Lafaurie, el
estrafalario líder de los terratenientes ganaderos predominantes en
la hacienda costeña, sabanera, llanera y urabeña.
El “modelo Lafaurie” es fatal para la paz. Implica una vuelta a los
siglos XVI-XVII-XVII-XIX y XX, de esclavitud, servidumbre y más
violencia contra los revolucionarios y reformistas agrarios.
Puede ser que el “Modelo Hommes” (Llerista) se aclimate a
los parámetros de una coexistencia entre la solidaridad campesina y
el afán de lucro de los inversionistas rurales que descartan el uso
crónico de la violencia como forma de relación de poder con los trabajadores y
jornaleros.
Esperemos los resultados del Foro, que bien puede ser el
mecanismo idóneo para la socialización y el debate de los otros temas
de la Agenda de La Habana. El evento está en manos expertas de reconocidos
académicos y profesionales reputados.
La página Web bien puede dar forma a la Paz 2.0, que es un mecanismo
acorde con los avances de la revolución informática del mundo pos moderno.
No es un canal sin importancia, bien utilizado puede enriquecer la intervención
ciudadana en el proceso de conversaciones para la superación del conflicto
armado y la construcción de la paz.
Soy optimista con el proceso de paz en curso. Da pasos adecuados y los
enemigos del diálogo se van quedando cada vez más solos. Para que referirnos en
detalle a estas aves de mal agüero. Que se consuman en su odio y amargura
y se atraganten con su monstruoso fuero militar para la impunidad de los “falsos
positivos”.