Por Alberto Pinzón Sánchez
Con
la “electorización” del proceso
de la Habana hecha por el presidente JM Santos, es decir (no la Politización
deseada) sino la utilización electoral del mismo para su posible reeleción , y
a medida que crece la campaña de odio de los agro-pecuarios , Uribeños y Militaristas
en contra de la paz; todos los “caciques electorales” de la llamada democracia colombiana, empeñados ya en la llamada Operación Avispa, con la que
pretenden colocar sus listas de senadores y parlamentarios que les prolongue la vigencia política, han abierto el abanico de propuestas electorales, todas
obviamente referenciadas a la “conveniencia” de continuar con dicho proceso en la
Habana.
Hay una verdadera eclosión de propuestas
electorales anti- dialogo de la Habana, que muestran la confusión política
inducida desde el palacio presidencial , donde se aseguró estaba guardada con
llave la llave de la paz: Las hay desde
la más cerril, biliosa y excremental representada por las acciones (de hecho y de derecho) del
“entorno de Uribe Vélez”, denunciadas por el sacerdote jesuita Jesús
Franco, director de la Comisión Intereclesial
Justicia y Paz (CMI 29.01. 2013), pasando por la del Liberal Cesar
Gaviria, quien debido a que “se dialoga en medio de la guerra” impuesto por JM
Santos, pide el levantamiento de la mesa de la Habana, o la del partido
conservador que sigue exigiendo, como
hace un siglo, “libertad y orden” sin necesidad del proceso de la Habana; hasta
la más piadosa y bien intencionada de la Sra Clara López, actual directora del
Polo Democrático, quien preocupada por alcanzar el “umbral electoral” y puede
ser que, asesorada alegremente por
alguien quien confunde técnicamente “ Tercero con Mediador” en un proceso de diálogos y gestión política de Conflictos, ha planteado en su
columna del diario el Tiempo (27.01.2013) que “Llegó la hora de la mediación”.
El proceso de la Habana no ha llegado a
un “Impase” real que impida su
continuidad y reclame la gestión de un mediador. Está si, sometido peligrosamente a las
presiones politiqueras y militares de los tradicionales enemigos de la paz y
demás pelechadores de la guerra en Colombia, opuestos
visceralmente a cualquier modificación en la estructura agraria vigente en el
país, sostenedores de la ideología dominante que alimenta el aparato de Propaganda
y Terror con el que se ha sometido por décadas a la explotación y despojo
al Pueblo Trabajador colombiano, y que sistemáticamente,
desde las alturas del Poder dominante ha desconocido el clamor popular y la
movilización social por la Paz y la justicia social.
Pero
lo que llama la atención en el planteamiento de la Sra Clara López, viniendo
de donde viene, es su afirmación para pedir la Mediación: “…..Bajo este parámetro (nada está acordado hasta que todo esté acordado.
Nota de APS), los sectores de la coalición de gobierno han mostrado, con
algunas aristas, que quieren que la paz se logre sobre la base de una rendición
de la guerrilla, mientras que esta aspira a conquistar considerables reformas
sociales a través de la negociación. Tanto
la idea de la rendición como la de hacer reformas estructurales por medio de la
negociación son objetivos descartables.
..Dos partes
enfrentadas que persiguen fines opuestos con restricciones temporales como las
ya anunciadas corren enormes riesgos de
perder la oportunidad de llegar a acuerdos. A ello se suma la ausencia de
una información certera sobre el real estado de las conversaciones que facilita
la manipulación mediática y política de lo que allí sucede o llegue a suceder…”
Afirmación que extrañamente regresa al origen del conflicto (rendición de la
guerrilla o reformas estructurales) y desconoce
que ya se ha llegado a un acuerdo (firmado) de 5 puntos para la finalización
del conflicto, que está a base del proceso sobre la cual se dialoga y se avanza
. Otra cosa es que se pretenda manipular e instrumentalizar con el miedo
a lo que han dado en llamar “el fracaso de la Habana” , con fines
electorales inmediatistas.
El llamado “Tercero” ya existe en la
Habana desde el inicio del proceso, representado por los gobiernos de Cuba,
Noruega, Venezuela y Chile, cada uno con sus respectivos papeles técnicos
asignados en el acuerdo firmado y, ninguno de ellos ha planteado que se está en
un impase insoluble que demande la intromisión de un Mediador como lo propone la Sra López. Así que antes de dramatizar en abstracto
sobre un inminente fracaso en la Habana
( que es lo que desean tanto Uribe como
la mayoría de electoreros de la llamada Unidad Nacional) y agotar un
recurso de la gestión técnica del
conflicto como es el Mediador; sería
mejor rodear de verdad la mesa de paz de la Habana y defender el proceso que
allí se desarrolla con hechos concretos, por ejemplo, contribuyendo a la movilización popular en
favor de la paz, en lugar de seguir batiendo banderitas con declaraciones
retóricas, que en el fondo le dan una ayudita
a Santos en su campaña electoral.
Imagen: Polo Democrático Alternativo