domingo, 6 de enero de 2013

El coronel a extraditar




El coronel a extraditar

 Coronel Hidalgo Guerrero

 


Por Narciso Isa Conde




Cursaron el expediente de extradición del coronel (general®) Francisco Hiraldo Guerrero, quien desempeñó por varios años la función de Jefe de Operaciones de la DNCD. La audiencia fue fijada para el próximo 14 de enero en la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia.

Hiraldo, como no pocos “colegas” dedicados a proteger el narco-tráfico, perteneció a la Marina de Guerra. Entre esa “camada” sobresalen varios Contralmirantes designados presidentes de esa entidad.

El caso Paya es solo una evidencia de las denuncias anticipadas contenidas en libros como “Confesiones Amordazadas” y “Más Confesiones Amordazadas”; mientras el referido coronel es solo una pieza intermedia de la maquinaria cívico-militar del Narco-Estado dominicano, denunciada con detalles en el mensuario impreso y en las emisiones diarias de Tiro al Blanco.

Hiraldo es un curtido capo militar subalterno, conocido en corrillos gubernamentales por sus fechorías protegidas durante una década. Por encima de él hay otros de mayor jerarquía y poder, múltiples veces denunciados.

Pero sucede que en este país no hay Ministerio Público, ni Justicia, ni organismos de investigación, ni aparatos militares-policiales, ni cúpulas políticas gobernantes… que no estén captados o condicionados por ese gran “negocio”.

Recuerdo que en el 2008 -a raíz del plan criminal en mi contra de factura Uribe-CIA y de la entrevista que por esa razón sostuvimos con el presidente Leonel Fernández- Lourdes y yo le tratamos varios casos de generales de la DNCD, DNI y de su propio entorno, asociados a narco-generales (tipo Montoya) y a cárteles colombianos; hechos tolerados entonces por la Estación de la DEA. Y se hizo el loco.

Solo ahora las autoridades estadounidenses, que siempre dosifican, manipulan y usan a conveniencia los narcos-casos relacionados con Estados subalternos, se han decidido a presentar un expediente “calimocho” del coronel Hiraldo, en el  que sus superiores siguen tras las opacas cortinas de la Casa Blanca.

Al coronel “operativo” le cargan ahora fuertes “cargos” de tráfico, posesión, importación y participación en las redes narco-mafiosas, que suman tres condenas a cadena perpetua. Miles de kilos de cocaína llegaron aquí desde Colombia y salieron hacia EEUUU bajo su “exclusiva” responsabilidad, silenciando conocidas complicidades de  sus jefes militares y políticos.

Los nombres, los beneficios, las modalidades de asociación con agentes subordinados, las conexiones con la DEA, la impunidad local, los paraguas políticos, la organización piramidal… se quedan en las bóvedas del poder imperial para fines de chantaje, órdenes supranacionales, represalias por eventuales deslealtades o diferenciaciones mediáticas políticamente rentables.

Hiraldo es lo que es, pero no es el todo. Ni todos son tan des-Ventura-dos como él en el ajedrez de Washington.

6-01-2013, Santo Domingo RD.